Para planificar la concepción hay que cuidar aspectos como la salud. Dejar ciertos hábitos y tener una dieta balanceada ayudarán en esta etapa. También ayuda mucho conocer cuál es el momento más fértil del mes.
Planificar un embarazo significa regular todos aquellos aspectos de la vida que me permitan condiciones de salud físicas y mentales apropiadas para recibir a un futuro hijo. Para esto se debe iniciar con un chequeo médico que me permita saber cómo está mi cuerpo.
Se recomienda llevarlo a cabo por lo menos tres meses antes del inicio del embarazo, de esta forma el médico podrá modificar conductas o trastornos que puedas padecer.
El momento preciso para el embarazo.
Si todo está normal y las condiciones son óptimas, puedes empezar a programar el momento. Lo primero es definir qué método utilizarás. Una herramienta que te ayudará mucho en el caso de querer hacerlo naturalmente es determinar cuándo es tu fecha de mayor fertilidad. Este cálculo estará determinado por la duración del ciclo y el momento de la ovulación.
La ovulación ocurre todos los meses en la mitad del ciclo menstrual. Por ejemplo, si una mujer tiene un ciclo de 28 días, el día 14 del ciclo ocurre la ovulación, teniendo en cuenta que el día 1 del ciclo es el día en inicia su menstruación y el 28 es aquel en donde inicia la próxima menstruación.
La mayor probabilidad de quedar embarazada ocurre el día previo a la ovulación, ya que el cuello del útero segrega moco cervical, sustancia que permite la llegada y el ascenso de los espermatozoides al útero.
Otro factor a considerar para determinar la fecha de ovulación es la Temperatura Basal Corporal, esta corresponde a los grados del cuerpo en reposo completo y al despertar. Cuando se produce la ovulación, aumenta la temperatura. El problema de este método es que no anticipa la ovulación, sólo se puede comprobar una vez que el hecho está sucediendo.
Mientras buscas el momento adecuado es recomendable el consumo de ácido fólico. Esta vitamina se asocia a la prevención de malformaciones congénitas por defectos del cierre del tubo neural, trastornos que aparecen en una etapa muy temprana del embarazo.
¿Estamos preparados para ser padres?
Aunque te encuentres saludable es preciso considerar ciertos factores elementales en la planificación familiar, y que sin duda determinarán cuán preparados están para ser padres. Autoevalúate según los siguientes conceptos:
- Tiempo: Tenemos suficiente tiempo para compartir con nuestra familia (hijos)
- Gastos: Estoy preparada económicamente para solventar los gastos que implica el cuidado, desarrollo y educación de un hijo
- Relaciones: Somos una pareja unida y segura capaces de compartir juntos los cambios y desafíos de la paternidad
- Cigarro y alcohol: Soy capaz de dejar el cigarro y el alcohol por el bienestar de mi futuro hijo
- Drogas y fármacos: ¿Consumo drogas? ¿Soy capaz de dejarlas voluntariamente? ¿Estoy siguiendo un tratamiento farmacológico que pueda afectar a mi hijo?
- Dieta y ejercicios: Llevo a cabo ejercicios y una dieta saludable, equilibrada, con bajo consumo de grasas y otros excesos.
Estos consejos o recomendaciones están pensadas para ayudarte durante un momento tan emocionante como lo es la planificación de una familia. Consulta con tu médico de cabecera.